Halloween se vive de muchas maneras.
Hay un Halloween de calabazas iluminadas, risas que se escapan por las calles y niños corriendo con sus disfraces, llenando la noche de alegría y magia. Y hay otro Halloween más oscuro, donde el olor a cera derretida y madera húmeda te envuelve, y las casas antiguas parecen cobrar vida con sus sombras.
Uno invita a divertirse; el otro a estremecerse. Pero en ambos, el cine siempre tiene un papel protagonista.
En Rodar en Aragón sabemos que el séptimo arte captura como nadie esa magia de octubre: la mezcla entre miedo y risa, entre lo cotidiano y lo sobrenatural. Por eso hemos preparado dos listas de películas: una para disfrutar en familia y otra para quienes buscan emociones más intensas.
Déjate llevar por un viaje a través del cine, donde cada película mantiene viva la esencia de Halloween.

Halloween para todos: miedo que se transforma en risas entre calabazas y fantasmas.
La siguiente lista es para todos los públicos. Son el reflejo de un Halloween luminoso, lleno de fantasía, humor y ternura. Historias que nos enseñan que los monstruos también pueden tener corazón.
- El joven manos de tijera – Un muchacho creado por un inventor vive aislado hasta que descubre el amor y la crueldad del mundo real. (1990)
- Pesadilla antes de Navidad – Jack Skellington, el rey de Halloween, se enamora de la Navidad y desata el caos más encantador. (1993)
- Hocus Pocus – Tres brujas del siglo XVII regresan a Salem para recuperar su poder y acabar bailando entre risas. (1993)
- Casper – Un pequeño fantasma solitario intenta hacer amigos entre los vivos. (1995)
- Hotel Transilvania – Drácula dirige un hotel para monstruos y aprende que los humanos no son tan terribles como parecen. (2012)
- La familia Addams – Un retrato cómico de una familia tan macabra como entrañable. (1991)
- La novia cadáver – Un joven accidentalmente se casa con una novia muerta y descubre el encanto del más allá. (2005)
- E.T. el extraterrestre – Un niño y un ser de otro mundo viven una amistad que trasciende galaxias. (1982)
- Monstruos S.A. – En un mundo donde los sustos son energía, un monstruo descubre que la risa es aún más poderosa. (2001)
- Coraline – Una niña encuentra una versión alternativa y peligrosa de su hogar detrás de una puerta secreta. (2009)

- Coco – Un niño viaja al Mundo de los Muertos para descubrir el valor de la memoria y la familia. (2017)
- Los cazafantasmas – Un grupo de científicos neoyorquinos se dedica a atrapar espectros con humor y protones. (1984)
- Wallace & Gromit: La maldición de las verduras – Una invasión de conejos mutantes pone en jaque a un pueblo inglés. (2005)
- Beetlejuice – Dos fantasmas contratan a un bioexorcista para ahuyentar a los vivos de su casa. (1988)
- Frankenweenie – Un niño devuelve la vida a su perro muerto en un homenaje a Frankenstein con alma. (2012)
- Kubo y las dos cuerdas mágicas – Un joven cuenta historias mágicas con su shamisen y debe enfrentarse a dioses y demonios. (2016)
- El Castillo Ambulante – Una bruja lanza un hechizo a una joven, que acaba viviendo en un castillo lleno de magia y vapor. (2004)
- La mansión encantada – Un agente inmobiliario y su familia se enfrentan a una casa llena de espíritus. (2003)
- El libro de la vida – Dos amigos compiten por el amor de una joven en un vibrante viaje al más allá. (2014)

El Halloween oscuro: cuando el miedo es arte
Estas son las películas para quienes apagan todas las luces y se dejan envolver por el silencio antes del grito. Es un cine que no solo asusta: inquieta, sacude y deja huella.
- El exorcista (1973) – Una niña poseída por el demonio y un sacerdote enfrentado a su fe. El terror definitivo.
- El resplandor (1980) – Un escritor enloquece en un hotel vacío mientras la nieve lo aísla del mundo.
- Halloween (1978) – La noche en que Michael Myers volvió a casa… y cambió el género slasher para siempre.
- El bebé de Rosemary (1968) – Una mujer embarazada sospecha que su hijo podría no ser del todo humano.
- Hereditary (2018) – Una familia descubre que su legado es más oscuro de lo que imaginaban.
- El proyecto de la bruja de Blair (1999) – Tres jóvenes se adentran en un bosque para rodar un documental y nunca vuelven igual.
- It Follows (2014) – Una maldición se transmite como una sombra que te persigue hasta la muerte.
- La cosa (The Thing) (1982) – En la Antártida, un ser capaz de imitar cualquier forma de vida desata la paranoia.
- Suspiria (1977) – Una joven bailarina descubre que su academia esconde un aquelarre.
- El conjuro (2013) – Basada en hechos reales: los Warren investigan una presencia demoníaca en una granja.

- Déjame salir (Get Out) (2017) – Un joven afroamericano visita a la familia de su novia y se topa con una pesadilla racista.
- Midsommar (2019) – Un festival ancestral en Suecia se convierte en una pesadilla a plena luz del día.
- Pesadilla en Elm Street (1984) – Un asesino invade los sueños de los adolescentes. Dormir ya no es seguro.
- Alien: el octavo pasajero (1979) – El espacio es el lugar más terrorífico cuando hay algo escondido entre los pasillos de la nave.
- La bruja (The VVitch) (2015) – Una familia puritana se desintegra entre supersticiones y presencia satánica.
- REC (2007) – Una periodista queda atrapada en un edificio en cuarentena junto a algo aterrador.
- El orfanato (2007) – Una madre regresa al hogar donde creció y los recuerdos cobran vida propia.
- El sexto sentido (1999) – Un niño asegura ver muertos… y un psicólogo intenta comprenderlo.
- It (Eso) (2017) – Un grupo de niños enfrenta a un payaso que representa todos sus miedos.
- La noche del cazador (1955) – Un falso predicador persigue a dos niños en una parábola visual sobre el bien y el mal.
- Verónica (2017) – Una adolescente invoca sin querer una presencia demoníaca tras usar una ouija.

Dos formas de mirar la oscuridad
Las primeras películas nos preparan para la vida; las segundas, para la muerte. Unas nos enseñan a reírnos del miedo, las otras a respetarlo. Y en medio, el espectador: curioso, vulnerable, deseoso de que la pantalla se apague y, sin embargo, rezando porque no lo haga todavía.
Halloween no es solo una noche. Es una manera de mirar: una invitación a cruzar el umbral entre la fantasía y el horror. Y el cine, una linterna que ilumina ambos caminos.
Rodar en Aragón celebra el poder del relato visual, desde la calabaza luminosa hasta el abismo insondable, recordándonos que todo buen miedo, como toda buena historia, empieza con una chispa de curiosidad